Hola a todos.
Hoy tocamos otro As de la baraja de póquer de la historia de la ilustración.
JEAN GIRAUD – Álter Ego: MOEBIUS (1938 – 2012).
Ilustrador francés.
Algunas de sus obras más destacadas:
– Teniente Blueberry – 52 Álbumes – De 1.963 hasta la actualidad.
– Con otros compañeros, funda la revista Metal Hurlant. – 1.974.
– Arzach (5 historias) – 1.975.
– El Garaje Hermético – 1.976-79.
– El Incal ( 7 historias) – 1.980-2.001.
– El mundo de Edena (6 historias) – 1.984.
– El corazón coronado – 1.992.
– El hombre de Ciguri – 1.995.
Además de su larga producción gráfica, por su gran faceta polifacética, colabora en el diseño de vestuarios y decorados de varias películas de gran éxito: Alien (1.979), Blade Raner (1.982), Tron (1.982), Dune (1.984), Masters del Universo (1.986), Willow (1.987), entre otras muchas.
Casi al unísono de la creación de Blueberry adopta el álter ego de MOEBIUS. Pero en una primera época tendrá algo aletargada esta segunda personalidad (supongo que por motivos más pragmáticos que otra cosa), que sólo explotará a partir de la creación de la revista Metal Hurlant en 1.974. Según los críticos y entendidos, con este apodo de Moebius producirá sus obras más innovadoras, experimentales y cambiará sus registros gráficos para hacerlos más depurados y atrevidos. Vamos, que para muchos Moebius terminó superando al Jean Giraud inicial. Pero a este duende le apetece hablar hoy, por los buenos ratos que le debo, de su creación más popular, extensa, del todo inolvidable: El teniente Blueberry.
Las aventuras del Teniente Blueberry no siguen una única vía argumental sino tres:
– Blueberry (unos 30 tomos) – Con guiones de extraordinario Jean Michel Charlier (1.924-1.989). Esta vía sería la original y supuso el nacimiento de la serie. Con una maravillosas comunión de guiones e ilustraciones que pronto obtuvieron un gran existo de público y de crítica (La mina del Alemán Perdido o Chihuahua Pearl, por mencionar solamente un par de las extraordinarias aventuras). Esta serie se centra fundamentalmente en la época de las guerras indias.
– La juventud de Blueberry (unos 19 tomos) – Con varios autores ya de guiones y dibujos. Esta serie nos cuenta los orígenes de Blueberry y se centra en la Guerra Civil americana.
– Marshall Blueberry (3 tomos) – También con varios autores de guiones e ilustraciones. Aquí Blueberry ya no es teniente y está fuera del ejército, en funciones de agente de la Ley y el Orden.
Mike Steve Donovan, alias Blueberry, es un soldado audaz, integro y honesto, pero a su vez descarado, pendenciero, jugador empedernido de póquer, mujeriego y bebedor; bueno, y también un extraordinario pistolero. Por todo ello, como no puede ser de otra manera, sus compañeros de aventuras más habituales son dos auténticas esponjas de taberna: el entrañable Jimmy McClure y el fiel Red Neck. Los argumentos de las aventuras casi siempre están movidos por la ambición: ya sea de gloria, poder o, más comúnmente, de riqueza. Así por su páginas iremos viendo desfilar a generales vanidosos, asaltos al Caballo de Hierro, pistoleros caza recompensas, minas de oro pérdidas, el tesoro de la Confederación, predicadores sin escrúpulos y la terrorífica frontera mexicana. Con una particularidad muy ingeniosa del gran Charlier y a la que sabía sacarle muy buen provecho, y es que en sus guiones iba inteligentemente intercalando a personajes reales de la historia que en algún momento se topaban con el devenir aventurero de nuestro teniente: Ulisses S. Grant, Cochise, Gerónimo, Allan Pinkerton (agencia privada de detectives), Wyatt Earp, Doc Holliday, por mencionar sólo a los que ahora mismo recuerdo; pequeñas perlas que le daban autenticidad y seriedad a sus historias. Vamos, que apoyándose en la larga extensión de la serie en el tiempo (¡50 años!) y en el espacio (¡52 álbumes ya!), esta serie se ha convertido en una auténtica crónica de la gran epopeya norteamericana de la conquista del oeste, como ninguna otra serie del Far West lo ha hecho ni creo que lo haga.
Sí, aquí y ahora, me declaro un incondicional admirador de esta serie. Admito que, cada vez que retomo algunos de mis queridos álbumes, de forma inexorable me veo abducido por la magia del dúo Charlier-Giraud y, de forma inmediata, me veo como uno más del grupo, cabalgando con ellos tragando el polvo del desierto, entiendo la lengua de los apaches, me divierto echando unas manos de póquer, sin temor a perder hasta la camisa, mientras nos tomamos unos whiskys de Kentucky y, como casi siempre ocurre, nos partimos la cara a puñetazo limpio contra cualquier impertinente provocador hasta acabar hechos unos zorros después de destrozar el Saloon, para terminar, todos juntos, Mike, Jimmy, Red y este servidor, durmiendo la mona en un sórdido calabozo. ¡Aaaaah, qué tiempos tan intensos! Pero, eso sí forastero, no te confundas, mucho cuidadito con este duende, pues de todos es sabido al oeste del Pecos que donde pongo el ojo (el bueno), ¡pongo la bala!
- Página del Teniente Blueberry.
- Página del Teniente Blueberry.
- Página del Garaje Hermético (Moebius).
- Página del Garaje Hermético (Moebius).
- Página del Garaje Hermético (Moebius).