Hola a todos.
Hoy, este duende, desea mostrar su admiración y reconocimiento merecido a la condición laboriosa de los humanos.
HOMENAJE AL PRIMERO DE MAYO OBRERO.
«Algo malo debe tener el trabajo porque si no, los ricos lo habrían acaparado”. Mario Moreno, Cantinflas, actor mexicano (1911-1993).
Himno del primero de mayo.
Ven ¡oh mayo!, te esperan las gentes,
te saludan los trabajadores;
dulce pascua de los productores
En los prados que el fruto sazonan
hoy retumban del himno los sones
ensanchando así los corazones
PIETRO GORI, poeta italiano (1865-1911).
A mis obligaciones.
Cumpliendo con mi oficio
piedra con piedra, pluma a pluma,
pasa el invierno y deja
sitios abandonados,
habitaciones muertas:
yo trabajo y trabajo,
debo substituir
tantos olvidos,
llenar de pan las tinieblas,
fundar otra vez la esperanza.
No es para mí sino el polvo,
la lluvia cruel de la estación,
no me reservo nada
sino todo el espacio
y allí trabajar, trabajar,
manifestar la primavera.
A todos tengo que dar algo
cada semana y cada día,
un regalo de color azul,
un pétalo frío del bosque,
y ya de mañana estoy vivo
mientras los otros se sumergen
en la pereza, en el amor,
yo estoy limpiando mi campana,
mi corazón, mis herramientas.
Tengo rocío para todos.
PABLO NERUDA, poeta chileno (1904-1973).
Sueldo.
Aquella esperanza que cabía en un dedal,
aquella alta vereda junto al barro,
aquel ir y venir del sueño,
aquel horóscopo de un larguísimo viaje
y el larguísimo viaje con adioses y gente
y países de nieve y corazones
donde cada kilómetro es un cielo distinto,
aquella confianza desde nos cuándo,
aquel juramento hasta nos dónde,
aquella cruzado hacia nos qué,
ese aquel que uno hubiera podido ser
con otro ritmo y alguna lotería,
en fin, para decirlo de una vez por todas,
aquella esperanza que cabía en un dedal
evidentemente no cabe en este sobre
con sucios papeles de tantas manos sucias
que me pagan, el lógico, en cada veintinueve
por tener los libros rubricados al día
y dejar que la vida transcurra,
gotee simplemente
como un aceite rancio.
MARIO BENEDETTI, poeta uruguayo (1920-2009).
Poesía al Trabajador.
Trabajan mujeres y hombres
sin descansar, de enero a enero,
los llamamos trabajadores,
asalariados, jornaleros.
Son muchos los que con su oficio
hacen la patria madrugando,
y ganando van el sustento,
muchos tienen malos salarios.
Los trabajadores del campo
que van empuñando el arado,
cosechando campos de trigo
frutos de su duro trabajo.
El hachero con su machete
tira abajo al fuerte quebracho,
y va labrando la esperanza
que sea justo su salario.
Hombres que empuñando el martillo,
están peleándole a la vida,
con las fuerzas y la esperanza
de llevar pan a su familia.
Maestros, médicos, bomberos,
enfermeros y barrenderos,
madrugan todas las mañanas
buscan el derecho al sustento.
Hombres que forman a mi patria,
llevan las marcas en sus manos,
señal de su duro trabajo,
obteniendo magros salarios.
Pongamos en alto sus nombres
a los obreros, jornaleros,
los luchadores del sustento,
démosle reconocimiento.
ARJONA DELIA (de la página, Taringa!).
El obrero.
Madre: cuando sea grande
¡ay que mozo el que tendrás!
te levantaré en mis brazos
como el viento alza el trigal.
Yo no sé si haré tu casa
cual me hiciste tú el pañal,
o si fundiré bronces,
los que son eternidad.
¡Que hermosa casa ha de hacerte
tu niñito, tu titán,
y que sombra tan amante
el alero te va a dar!.
Yo te regaré una huerta,
y tu falda he de colmar
con los frutos perfumados:
pura miel y suavidad.
GABRIELA MISTRAL, poetisa chilena (1889-1957).
Bendito Obrero.
Bendito obrero
que traes progreso;
Tus manos lastimadas
son sinónimo del desarrollo,
pero en el recuerdo
quedarás ignorado.
Explotado y vendido al capital,
regalas tu fuerza a tu patrón,
y él te reprime e ignora por embarcarte
en este sendero sin retorno,
en tu lucha contra el mal.
El sindicalismo es
de capital transnacional
y en él ya no recaen tus esperanzas.
Ahora sólo te queda el orgullo obrero
y lo debes de sacar.
“Unidad, Igualdad, Progreso, Éxito”
será tu consigna al apoderarte del paraíso.
Porque en la vida después de la muerte
existe el reino de los cielos
y sólo se admiten obreros, y ahí
manda el pueblo.
Bendito obrero
marginado y abusado,
tus manos son la base de la civilización.
Recuerda siempre, que hay que luchar
unidos contra el imperialismo y el capital;
y cuando tú ya no estés,
el mundo entero te ha de honrar,
bendito obrero.
ANDRÉS CASTRO ARÉVALO (de mundopoesía.com).
A los trabajadores del campo.
¡Trabajadores del campo,
forjadores de la tierra!
El Ejército del pueblo
os respeta y os venera.
Os ayudará si es preciso
a recoger la cosecha,
porque la cosecha es parte
del triunfo de nuestra guerra.
Tú, con tus manos callosas,
labras, siembras, recolectas
frutas, verduras, el trigo
donde saldrá el pan que ofrezca
el sustento a tus soldados
para seguir la pelea.
Tus soldados te prometen,
como premio a tus proezas,
ser disciplinados, nobles,
y al mismo tiempo ser fieras
para aplastar al fascismo,
para aplastar a la hiena
que chupaba tu sudor
y nunca te abrió la escuela.
Lucharemos los soldados
porque tuya sea la tierra,
que eres el que la trabajas
y el que haces que tu fruto ofrezca
con el que la Humanidad
toda con él se sustenta.
Con nuestro limpio fusil
y con la hoz que tu siegas,
con la ayuda del martillo
y la ayuda de la ciencia,
todos, con el puño en alto,
terminaremos la guerra.
MIGUEL SANCHEZ (“Campesino”), de La Voz del Combatiente, Madrid 26 de junio de 1937.
“Cuando el trabajo es un placer la vida es bella. Pero cuando nos es impuesto, la vida es una esclavitud”. Máximo Gorki, escritor y político ruso (1868-1936).
- El trabajo infantil (Artes gráficas).
- La cotidianidad del peligro.
- Duras jornadas de la Industria.